martes, 4 de septiembre de 2012

Sube el paro y nada cambia.


Acaban de salir los datos del paro del mes de agosto en Extremadura, son sencillamente demoledores e inaceptables.

El número de desempleados registrados en las oficinas de los servicios públicos de empleo en la región ha aumentado en 891 personas en el mes de agosto, un 0,66% más respecto al mes anterior, lo que sitúa el número total de desempleados extremeños en 136163.

En los últimos doce meses, el paro se ha incrementado en Extremadura en 16570 personas, con un aumento porcentual de 13,86% mientras que el número de contratos registrados representa un 2,37 por ciento menos respecto al mes anterior.

Considero que estos datos son lo bastante claros y se han consolidado suficientemente en el tiempo como para que se puedan achacar a herencias pasadas o a situaciones que vengan del exterior, es evidente que la economía extremeña no es ajena a las turbulencias de la economía nacional y europea, pero no es menos cierto que si no se aplican políticas novedosas y atrevidas las cosas seguirán igual que hasta ahora, es decir, de mal en peor.

Se ha comprobado que PP y PSOE pretenden reducir el paro con las mismas medicinas variando sólo el color del envase, se empeñan en mantener un sistema que se ha demostrado que no sirve, que hace aguas y que sólo se puede sostener a costa de una sangría de los ciudadanos. El porqué de esta inacción sólo se entiende debido a que lo que falla es el aparato administrativo que se ha creado para dar cabida a los mastodónticos partidos mayoritarios. La solución pasa por cambiar el sistema y ese es un precio que PP y PSOE no están dispuestos a pagar y por consiguiente la sangría no cesa.

Por supuesto que el Gobierno de Monago, al igual que el pasado de Vara pueden presentar políticas eficaces y distintas, no es cierto que sólo haya una política posible y que esa sea la suya. De hecho cada vez con más fuerza suenan los "tambores" de Bruselas pidiendo cambios en el estado autonómico insostenible que tenemos.

Cambios no significa volver a una España centralista, la eficacia en la gestión no pasa por ahí, adelgazar las administraciones y aplicar políticas de igualdad no es sinónimo de eliminar competencias pero sí de eliminar altos cargos, duplicidades etc...

Si se dan cuenta se habla de una ley que va a acabar con las duplicidades pero esa ley nunca llega y sin embargo las medidas que nunca se iban a tomar son las primeras en ser ejecutadas.

Sube el paro y nada cambia en las políticas que ejecuta Monago, así, ya me dirán como van a cambiar las cosas.

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