viernes, 27 de abril de 2012

Sin palabras.

Ante la deriva del PP en materia de terrorismo, este es el mejor y más terrible resumen de lo que creo que está pasando. La manipulación de los sentimientos de unos ciudadanos que además son víctimas, por parte de unos políticos sin plabra.

jueves, 19 de abril de 2012

Pensar antes de hablar.


Las cosas van rápido, demasiado rápido para que las podamos digerir. Apenas se acaban de cumplir 100 días de Gobierno del PP y tenemos tragadas o mejor dicho, atragantadas, varias reformas, una huelga general y las elecciones andaluzas y asturianas. Como si esto no fuese suficiente cada mañana nos olvidamos del escándalo del día anterior pues con el café matutino han dejado de ponernos la chocolatina y en vez de eso nos obsequian con la última sinvergonzonada del de turno. Los unos bombardean a los otros con lo primero que se les ocurre y nadie se para a pensar si lo que ha dicho es una tontería o no lo es. Demasiado rápido, digo, para poder pensar con claridad y creo que eso es justamente, lo que en estos tiempos hemos de hacer, pensar.

Echo de menos un análisis que no sea apresurado o producto de las primeras impresiones que se nos vienen a la cabeza. Sube la prima de riesgo y baja el IBEX, ¿cómo es posible tras tanta reforma?, me gustaría que algún político me dijera las razones por las que no se fían de nosotros en Europa y si a los profetas del Apocalipsis les debemos tomar un poco en serio. Pero no, nadie dice nada con la suficiente enjundia, ni Gobierno ni oposición y de pronto salta a la palestra otro tema candente y de oca a oca, tipo por que me toca, soltamos lo que tenemos entre manos y nos enfrascamos de nuevo en los dimes y diretes que no nos llevan a ninguna parte. Así no es posible avanzar, cada paso requiere una reflexión. Creo que el ciudadano está saturado, mal informado y en este caldo de cultivo ha dejado de pensar para simplemente, dejarse llevar. Así no...

El ejemplo más claro de a lo que me refiero es lo que ha ocurrido con el Rey. No entraré a valorar el hecho en sí, si no las consecuencias del mismo. Una vez se conoció el suceso comenzó una avalancha de críticas y opiniones basadas en tres o cuatro estereotipadas ideas que se repetían una y otra vez, nadie se paró a preguntar por qué, o se molestó en ir un poco más allá, puede que no hubiese un más allá pero nadie hizo el esfuerzo de cuestionárselo. Antes de que se supiesen todos los datos de la noticia ya había varios comunicados, peticiones de abdicación y vivas a la República. Se han hecho chistes y composiciones fotográficas que han sepultado a esas otras composiciones que se hicieron sobre el nieto del Rey y que han condenado al olvido al yerno del mismo. El ensayo y la crítica sesuda han sido sustituidos por los vídeos del youtube y los JPEG´s cachondos, estos son los que hoy en día crean opinión, no nos engañemos, es la cruda realidad y así nos va.

Olvidada la Huelga General que según nos dijeron, habría de cambiar la voluntad reformista del Gobierno, la izquierda de este país, se ha volcado a reclamar el regreso de una República con los más disparatados argumentos. No he escuchado ningún razonamiento de peso que defienda el modelo republicano frente al monárquico. Se solicita una revisión del Estado en base a chistes y prejuicios, se apela a los privilegios, a la falta de transparencia, a la falta de sensibilidad que aseguran tiene el monarca, pero no se entra a valorar el modelo, nos perdemos en las hojas del árbol y así nunca llegaremos al tronco.

Yo soy monárquico, tengo mis razones y sin embargo creo que el modelo republicano es bien sencillo de defender, se me ocurren argumentos mucho mejores que los que se han expuesto y difíciles de rebatir. El hecho de que no se utilicen me hace sospechar, no sé si es que falta calidad intelectual o es que nos toman por idiotas.

Recuerdo que lo del Rey es sólo un ejemplo, lo que denuncio está ala orden del día y sucede contínuamente. Echo de menos una reflexión tranquila y bien argumentada, que no se me vaya por las ramas y que diseccione el problema para, finalmente, dar un diagnostico que por lo menos esté mínimamente razonado. No pido que todo el mundo esté de acuerdo, sólo pido que no se hable por hablar y que se sea un poco más responsable.



martes, 10 de abril de 2012

Juguemos a las diferencias.


Uno de los grandes problemas que tiene la política española es que todo el mundo piensa que hay dos grandes partidos PP y PSOE, y que ambos poseen unos discursos claros y bien definidos y la realidad es que esos partidos son en realidad 17 distintos y si mi apuran alguno más. De este modo es imposible que exista una política nacional cohesionada y solidaria. Es cosa de las leyes de Newton, por mucho que nos empeñemos es imposible ir hacia ningún lado si cada uno empuja en una dirección distinta.

Otro problema es que esos partidos minúsculos que forman, a su vez, parte de esos los dos grandes, cambian de parecer según sople el viento de la actualidad con la mayor de las naturalidades y no se sonrojan de ir en contra de sus programas electorales ni del dedo acusador de la hemeroteca y si no vean como ejemplo el de la Presidenta de Madrid.

 

Si a todo esto se le añade el hecho de que una idea razonable dicha por uno que no sea PP y PSOE, duerme el sueño de los justos de los medios de comunicación hasta que no es vilmente copiada, tarde y mal, por uno de los dos mastodontes, entonces tenemos la pócima ideal de la crisis política en la que nos vemos inmersos:

Dos partidos sin rumbo que tienen a su vez copados y maniatados a unos medios de comunicación que son incapaces de ser independientes.

martes, 3 de abril de 2012

Bibliotecas públicas y bolsas de la compra.


Ayer tarde y gracias al libro de caras, tuve conocimiento de que el Ayuntamiento de Parla ha aprobado la implantación de un impuesto de 3 euros por la utilización de los servicios de la biblioteca municipal. La noticia de marras ha conseguido que se me revuelvan las tripas.

Espero que nadie se ofenda si digo que una biblioteca ha de cuidarse como si de un templo se tratase y aún más. El acceso de un modo gratuito y por parte de todos a la información que contienen libros, discos y soportes para vídeo, es imprescindible para que los ciudadanos puedan crearse una opinión sobre las cosas que les rodean y suceden y de ese modo puedan ser realmente libres. Es imposible crearse un criterio propio si uno no puede acceder a determinada información y no nos engañemos, las trabas para el acceso a las distintas formas de pensamiento y creación artística no sólo las ponen de un modo violento los estados totalitarios, se pueden poner muy democráticamente con una tasa como la que ha acordado el Ayuntamiento de Parla.

Se confunden los términos o tratan de confundirnos a los ciudadanos. En estos tiempos en los que el copago por determinados servicios está tan de moda pretenden hacernos creer que eso es la solución universal y nada más lejos de la realidad. Una cosa es imponer una tasa simbólica a determinado servicio para que no se abuse de él y otra ponerla sobre algo que no importa en absoluto que se abuse de ello. No es lo mismo que se despilfarren medicamentos porque como son gratis no pasa nada, a que los jóvenes españoles les entre el prurito de pasar muchas horas leyendo libros en la biblioteca que también es gratis.

Hace unas semanas el dueño de Mercadona ponía el ejemplo perfecto, hablaba de lo mucho que habían ahorrado las grandes superficies al cobrar por las bolsas de la compra. Reconozcámoslo, hacemos una compra de 50 euros y por no pagar 10 céntimos por las bolsas, nos la tramemos de casa. Esta es la realidad, así funcionamos. Por ello no está mal pensado que para evitar que los centros de salud se conviertan en lugares de reunión o para que las medicinas no se despilfarren, se ponga una pequeña tasa simbólica que nos disuada del abuso, pero en las bibliotecas no, en todo caso habría que hacer todo lo contrario.

No quiero entrar en el hecho de si ha sido determinado partido el que ha tomado la decisión porque está visto que PP, PSOE, IU, PNV, CiU, etc... son la misma cosa mal que les pese, aparatos mastodónticos que sólo luchan por su supervivencia y esta medida la podría haber tomado cualquiera de ellos.

Espero que la presión social les haga cambiar de opinión, para salir de la crisis no vale todo.