El día después.

Ayer el Parlamento quedó sumido en la mayor de las vergüenzas, unos volvieron a ir contra su programa, el programa con el que ganaron las elecciones (el PP) y los otros se olvidaron de sus muertos (PP, PSOE y PNV) y dieron cobertura a aquellos que llaman "compañeros" a los etarras que asesinan niñas de 6 años (Amaiur) y sólo cinco diputados (UPyD) fueron lo suficientemente valientes como para defender su programa, a las víctimas del terrorismo y las sentencias del Tribunal Supremo y del Constitucional. Un grito democrático mudo y sordo por lo que se puede entrever muchos medios de comunicación (increíble lo que publican, menos mal que existen las hemerotecas). 

Y es normal que a uno se le venga a la cabeza las caras (ahora se sabe que son caras-duras)de los dirigentes políticos haciéndose la foto con las víctimas en las manifestaciones multitudinarias y en los funerales. Es imposible dejar de pensar, aunque esto sea pura demagogia, en los cuerpos sin vida de sus compañeros de filas que yacen bajo tierra. Es increíblemente triste comprobar que todo aquel despliegue de esfuerzos, de declaraciones, de fotos, abrazos, lágrimas y promesas electorales iba encaminado sólo y exclusivamente a lograr el poder y ahora, una vez conseguido, si te he visto no me acuerdo.

Sinceramente, lo siento mucho por aquellos que creyeron que Rajoy sería distinto. 

Dejo aquí algunos audios:

El día de ayer el presidente de Voces contra el Terrorismo contaba como les habían ignorado a la hora de redactar el "texto alternativo".

Hoy, Rosa Díez cuenta lo que se vivió ayer en el Parlamento.

En este último destaco dos frases que son de una obviedad tal que resultaría demoledora si no fuera porque la sociedad está narcotizada:

"Tanta palabrería del PP y del PSOE para tratar de demostrar que Amaiur no es lo que es, hasta que sale el representante de Amaiur y demuestra que son lo que son y toda duda de lo que eran queda despejada".

"A los políticos han de juzgaron por lo que digamos si no por lo que hagamos".

Ayer fue el día en el que las palabras quedaron arrasadas por los hechos pero a pesar de todo aún hay esperanza, son pocos, son sólo cinco (UPyD) pero hacen el suficiente ruido...